Volvemos a escuchar
de los gobernantes y los voceros mediáticos de los grandes grupos
gobernantes o que han o esperan gobernar, la tesis que la petición
popular de un referéndum que refrende al futuro rey o por el
contrario sea rupturista y seamos república, no esta contemplada en
“las reglas del juego”.
“Las reglas del
juego” son el bálsamo de fierabrás con el que engañan al pueblo
español una y otra vez dado que son “reglas del juego” cuando
interesa y no lo son cuando no interesa.
“Las reglas del
juego”, son las que inamovibles evitan referéndums en Cataluña,
en el País Vasco, o la continuidad o no de la monarquía, pero que
son absolutamente móviles cuando interesa los políticos de turno.
Todos sabemos que la constitución española se ha modificado dos
veces una en 1992, para poder adaptarnos al tratado de Maastrich y
otra en 2011 para fijar limites de déficit y de deuda entre las
distintas Administraciones Públicas. (En cristiano, primero cobran
los bancos y si sobra algo es para sanidad y educación... u otras
causas quizás menos nobles)
“Las reglas del
juego”, se blindan a si mismas en los títulos I, y II, que
conciernen a la forma de estado y a la corona, pero si bien con la
corona nos la cogemos con papel de fumar, con el articulo 40 del
titulo I que dice “Los poderes públicos promoverán las
condiciones favorables para el progreso social y económico y para
una distribución de la renta regional y personal más equitativa, en
el marco de una política de estabilidad económica. De manera
especial realizarán una política orientada al pleno empleo”, pues
esto la culpa de que no se cumpla es de la crisis, los mercados o del
susum corda.
Pero lo que mas me
molesta es que cuando si se cumplen “Las reglas del juego”, los
gobernantes tampoco las cumplen, veamos: Señores vascos, no
hablaremos de soberanía mientras haya violencia y se hagan las cosas
por vías democráticas, bien, ya no hay violencia y los antiguos
pro-violencia están en las instituciones ¿se ha hablado algo?, no.
En Cataluña en la misma linea, no hablaremos de independencia si no
es por vías democráticas, los catalanes llevan años pidiendo una
alternativa democrática para, ya no independizarse sino preguntar, y
la respuesta es la misma: “Las reglas del juego” no lo permiten,
cuando lo que no tienen es la voluntad política. Ahora con el tema
de la república, es momento bueno de preguntar, pero “las reglas
del juego” no lo permiten.
Estos y otros
problemas han convertido a nuestra joven democracia en una democracia
de castas, como bien define Pablo “el coletas” Iglesias. Y por
ello, nos veremos radicalizados en el futuro, hay sinvergüenzas que prefieren
una España en conflicto que una España democrática.
España es hoy en
día, un campo de fútbol que PPSOE, la banca, la monarquía y el
clero tienen la pelota, pero cada día mas, y afortunadamente ganando
terreno en las urnas, el pueblo se va acercando a campo de juego,
espero que cuando se llegue a los vestuarios, no salga nadie a
defender la pelota.