La idea del perfeccionamiento moral y material de la humanidad, surge a raíz de los ilustrados a finales del siglo XVII y que se materializo en la revolución francesa. Los ilustrados, querían disipar las tinieblas de la humanidad mediante las luces de la razón. Esta forma poética de pedir un mundo mejor y mas esclarecido ha quedado dispersada y solo se recuerda en los libros de historia y en las reuniones masonicas.
Pero la llama que los ilustrados encendieron e iluminaron el siglo de las luces, siempre ha estado en el corazón de los ciudadanos, muchos de los conceptos que emanaron los empiristas, libertinos y racionalistas calaron en la sociedad. Hoy, no entenderíamos nuestra sociedad sin la separación de poderes de Montesquieu, la economía de Adam Smith, o la separación iglesia-estado de Voltaire. No entenderíamos nuestra sociedad sin el liberalismo ni sin las razones que se plasmaron en la Enciclopedia, con sus cuatro visiones, filosófica, científica, critica y burguesa.
Los poderosos, crearon su contrarevolución marcando el contrapunto con el despotismo ilustrado, el imperio y la expansión colonial.
En un lado, las ideas de bienestar e ilustración y en el otro el orden social vertical del clero, nobleza y capital. Y estas dos ideas contrapuestas iban modificándose y haciendo avanzar la sociedad.
En la primera mitad del siglo XX, dos grandes guerras, marcaron el mundo y en esas grandes guerras dos visiones plantaron su bandera en la humanidad, por un lado el comunismo, por otro el capitalismo.
Carlos Marx, Marxista |
Filosoficamente hablando, el comunismo, entendía que la sociedad comunal puede producir bienes que la comunidad puede usar para su subsistencia y sus excedentes tienen que ser repartidos igualitariamente.
Ayn Rand, objetivista |
En contraposición, la filosofía objetivista-capitalista, marca como valor el individualismo, la codicia como motor de la generación de bienes, dejando la comunidad como la suma de sus integrantes sin relación organizativa.
Una vez mas fue la iglesia, en este caso anglicana, quien puso en tela de juicio los extremos filosóficos y basándose en la miseria provocada en la gran depresión como prueba que el capitalismo no funcionaba y constatando las cárceles que se convertían los estados comunistas propuso la teoría del estado de bienestar.
W. Temple, promotor de la idea de estado del bienestar. |
El estado del bienestar es aquel donde el estado usa la tesis comunista para proveer a los ciudadanos de servicios básicos comunales, normalmente educación, defensa, justicia y sanidad y dejando el resto de la actividad social en manos de las ideas objetivistas-capitalistas de mercado.
Los políticos, sabiendo que el poder se ejerce teniendo el control de bienes necesarios para la población, han ido tomando cuotas de la parte que debería gestionar el mercado y la sociedad civil, inmiscuyéndose en el libre comercio generando empresas publicas que nada tienen que ver en las necesidades básicas de los ciudadanos, los ejemplos los tenemos a millares, transporte, medios de comunicación, agencias de import-export, etc.
De este modo, el estado de bienestar se ha visto comprometido al sobrevenir una crisis, que no nos equivoquemos, esta mas que dirigida y controlada por las grandes corporaciones que veían que grandes tartas de negocio se estaban colectivizando (tesis comunista).
Hasta ahora, las grandes corporaciones, la banca, las transnacionales, no habían movido ficha, por que habia una contraposición social a sus tesis: el comunismo.
No olvidemos que los estados occidentales han querido ser capitalistas-objetivistas pero nunca lo han hecho por que tenían en frente al comunismo y sus ideas y estas podrían hacer dudar de su extremismo (el comunismo es otro extremismo), por ello transigían en el estado de bienestar. Transigieron con los derechos de la mujer, por que temieron que el feminismo abrazara la causa comunista que le daba el estatus de ciudadana igual al varón ya en 1917. Transigieron con las descolonizaciones por que la idea comunista era la de apoyar la independencia de los estados. Transigieron con los convenios colectivos por que la tesis comunista de que la fabrica es de quien la trabaja, podría provocar revueltas. Transigieron en reformas agrarias por que el marxismo habla de colectivización de la tierra.
Pero hoy en día, con el comunismo de estado desaparecido, el socialismo tratado como una ideología (que no filosofía) del siglo XIX y trasnochada y con unas agencias de rating, estados, UE, bancos centrales, bancos privados diciendo que solo hay dos caminos: Capitalismo, privatización y objetivismo o muerte. ¿Que nos queda para evitar que en breve, a las reducciones de derechos laborales, a las reducciones de acceso a la sanidad y educación, a las reducciones de empleo publico, a las disminuciones de facto de salarios ( mas irpf + congelación = reducción) se le unan la reducción de festivos o vacaciones o los sueldos miserables?
Estoy augurando un futuro negro, que no llegaran a imágenes dickensianas de Oliver Twits y ese futuro negro parece imparable, la clase trabajadora.. perdón, que ya no hay clases, que eso de la lucha de clases es del pasado... pues alguien, saldrá perjudicado en sus derechos, en sus condiciones de vida mientras los capitalistas de las grandes corporaciones siguen viviendo en una opulencia insultante, mientras se atrincheran en países mas ricos para joder a los mas pobres esquilmando sus recursos ayudados por el fondo monetario y los bancos, que ya son propietarios de 1/3 de todos los bienes raíces de la tierra, pero pobrecitos hay que ayudarles.
Si no recuperamos las posiciones de defensa de lo colectivo, los defensores del individualismo tendrán una autopista para correr. Los extremos son siempre peligrosos hace falta el blanco y el negro para navegar por una maravillosa gama de grises, donde todos cabemos y todos vivimos, seguros y en paz.
Como hemos olvidado la historia, estamos condenados a repetirla y si volvéis al principio la historia comienza con una revolución. Aun podemos evitarla.
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